Queridas hermanas y hermanos, Pauled vive conmigo en Sutamarchan – Región de Boyacá en Colombia y vine de Perú a compartir mi experiencia como Eremita en la llanura de una montaña donde está ubicada la fundación de Pauledt que es una casa de acogida para niñas con problemas de vulnerabilidad. Estamos a 2 km. de distancia del pueblo Sutamarchan…Mi Ermita está ubicada a 100 mts de distancia de la casa de Pauledt… Las dos estamos dedicadas a las tareas del campo en cuidado de huerta, ovejas, gallinas para el sostenimiento de la obra fundada por Pauledt, estoy aprendiendo mucho de ella porque es la primera vez que vivo en zona campestre fuera de mi país. Unión de oraciones por Pauledt el día 3 de Mayo. Bendiciones y un gran abrazo para uds.
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El camino de descenso a las profundidades de nuestro ser y salida al encuentro de nuestros hermanos es cíclico y a la vez progresivo, hasta que veamos a Dios ‘cara a cara’. Por esto no hay auténtica mística sin ética, ni ética verdadera sin mística, ni verdadera religión sin mística ni ética. Y todo esto lo vive la persona santa en el aquí y ahora del presente de Dios. Todo comienza con una decisión, la de salir, la de ponerse en camino para descubrir nuevos horizontes, abrirse a lo provisional y hacerse peregrino.
Quiero compartir esta Reflexión
en torno a una inquietud
sobre una
«Fraternidad amplia».
Desde mi Nazareth. Rogelio Bernal
Se me pide dar algunos elementos que puedan fundamentar la puesta en marcha de una «Fraternidad amplia». Esto, por supuesto, dentro del carisma foucauldiano y teniendo en cuenta lo que ya existe. Partimos del proverbio: «no hay nada nuevo bajo el sol». Es decir, no vamos a «inventar» nada. O como dice S. Juan, «les doy un mandamiento nuevo que es antiguo». Quiere decir, renovar las cosas dentro de lo que ya está establecido que es Jesús y el llamado a la fraternidad universal.
Pero quizás podríamos partir de aquí. Porque el elemento «nuevo» sería Nazareth. Y no que sea nuevo, pues es el más antiguo. Pero dentro de lo que el hermano Carlos quiso revivir, podríamos analizarlo desde un nuevo Pentecostés en la Iglesia, a partir de Nazareth. Y si no me equivoco, fue lo que pretendió el hermano Carlos, o mejor, el Espíritu Santo a través de él. Y dónde podríamos ubicar el germen de esto? Sencillamente en nuestro bautismo. Allí ha sido sembrada una semilla que está destinada a desarrollarse y crecer.
Desde allí, creo yo, podríamos hablar de una «Fraternidad amplia». Quiere decir, que ésto se da dentro de una Comunidad de bautiza-dos, que quieren revivir en serio su compromiso bautismal. Pero se incluye el «bautismo de deseo», o sea, para los que, aún no profe-sando el Credo Católico o cristiano, desean ser fieles a lo que en conciencia creen. Y podríamos ponerlo también y consecuentemente desde ese «llamamiento universal a la santidad». No olvidemos que ya los Hechos de los Apóstoles nos habla, y es actual esta Palabra, de la Comunidad ideal: Compartir lo que tenemos y desde lo que somos; entonces el camino sería, dar a conocer Nazareth desde estas raíces. Que seamos concientemente capaces o dispuestos, con la ayuda de Dios, a asumir este compromiso. A «dejarlo todo» , entrando en esa pobreza de espíritu a que nos llama el hermano Carlos, que no es otro que vivir el Evangelio en profundidad. Si ésto hacemos, el Espíritu nos abrirá caminos, que es el que ya ha abierto en tantas ramas donde se vive el espíritu de Foucauld; porque tendremos que seguir siendo parte de esta gran familia.
Cómo podríamos llevar a la práctica lo anterior?
1. A través de un contacto personal. Este se daría mediante un tes-timonio. Es decir, por «atracción». Pero debemos desde un principio ser claros en explicitar de qué se trata. Una organización? No. Dejar simplemente que fluya el Espíritu.
2. Ser claros también en delinear la espiritualidad de Nazareth. Se trata de un compromiso con el hermano, desde Jesús, pero en las condiciones más ordinarias de la vida. Llevar el «culto» al mundo, en vez de llevar el mundo al «culto»: éste tomará su lugar en el momento oportuno. En este sentido, se parece más a un «Primer Anuncio» o Kerigma, aunque no necesariamente explícito. Pero sí, con la seriedad y la fuerza testimonial suficiente.
3. Debe marcar un estilo de vida y de relación donde lo primordial sea el amor, extendido a todo ser humano. Y debe transparentar el Evangelio, de tal modo que sea evidente. En otras palabras, ser Evangelio viviente, desde el lugar de Nazareth. Llevar el Misterio a la realidad cotidiana y desde alli, tejer relaciones de amistad y fra-ternidad, donde se pueda decir «Cómo se aman!»
4. Por último, un compromiso personal de oración que pueda dar frutos de amor y entrega a los demás, especialmente a los más pobres, creando condiciones para la Justicia y la Caridad universal. Todo ésto, con la fuerza del Espíritu. Para ésto, ser fiel al mismo.
Tomando pie en la «Obediencia del Espíritu», tendremos que mirar por dónde nos lleva el Espíritu. No puede ser un camino distinto del de los Primeros cristianos. Pero sí, insertarse en la realidad de hoy. Es este presente de la historia que nos interpela y nos pide dar una respuesta. Esta no es distinta tampoco al Evangelio. Pero cómo hacerlo desde el hermano Carlos? Vale decir, desde Nazareth? Desde una «Fraternidad amplia» no quiere decir hacerlo menos radical, pues ésta la da el Evangelio. Pero sí hacerlo asequible a un mínimo de personas- no tanto por la cantidad, sino por la calidad- de tal modo que se cree una identidad y a la vez relaciones directas, pero cada uno en su «Nazareth». Creada esta identidad, se podría pensar en una pequeña estructura, muy pequeña, en la cual la identificación tenga lugar. Y este pequeña estructura tendría solo un fin: Garantizar la vivencia del Evangelio en un contexto social, personal y familiar. Y vale agregar, de estilo Laico.
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Cada uno de los miembros de la Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld estamos llamados, fruto de nuestra vivencia de Nazaret, a vivir una fraternidad interna como comunidad y una “Fraternidad abierta” como nos propone el hermano Rogelio. Que el Espíritu del Señor Resucitado nos ayude en esto.
BOLETÍN DE “NOTICIAS Y COMUNICACIONES”
Nº 238 – 29 de mayo de 2019
Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld
http://horeb-foucauld.webs.com
Maximiliano Kolbe, además de santo, es un símbolo universal del espíritu de sacrificio y de la solidaridad humana. Tras ingresar en la orden de los franciscanos, Kolbe se convirtió en editor de varias publicaciones pastorales y fundó la denominada «Ciudad de la Inmaculada» cerca de Varsovia. Sus actividades apostólicas despertaron el recelo de las autoridades alemanas y Kolbe fue llevado al campo de concentración de Auschwitz en 1941. Allí, en un acto de amor extremo, Kolbe sacrificó su vida para salvar a un padre de familia condenado a muerte. La vida de este Santo no es sólo una biografía ejemplar, sino un mensaje de esperanza. En palabras de Juan Pablo II, Kolbe se ha convertido en un «signo de la nueva era: la civilización del amor».
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NOTICIAS HOREB 79
Hay dos clases de corruptos. Los corruptos activos y los corruptos pasivos. Activos son los que matan, roban, mienten, ofenden o hacen daño de la manera que sea. Pasivos son los que se callan o se cruzan de brazos ante los atropellos y las injusticias que cometen otros y que se tendrían que denunciar, pero los corruptos pasivos se callan o se quedan quietos, para no complicarse la vida.
Con la actividad de unos y la pasividad de otros se produce la sociedad corrupta, engendro de todas las violencias y causa de indecibles sufrimientos.
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NOTICIAS HOREB 78
Presentación de los libros «El Cristianismo» y «El Islam» de Josep Lluís Vázquez el próximo jueves 25 de septiembre a las 19h en la Llibreria Claret – Barcelona (España). Invita la Editorial San Pablo, el Institut Emmanuel Mounier Catalunya y la Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld con las intervenciones de Nicolás Saiz, teólogo y hermano de la Comunidad Horeb y Gabriel Sanz, experto en diálogo interreligioso.
Si bien en el seguimiento evangélico de Jesús de Nazaret, en el carisma de Carlos de Foucauld, los hermanos y hermanas de la Comunidad Ecuménica Horeb, acentuamos con Jesús el tiempo de Desierto (oración, acogida, discernimiento), vivimos también con Jesús el tiempo de Nazaret (trabajo, compromiso social y eclesial) y el tiempo de Palestina (amistad, sanación y anuncio del Reino de Dios), con una vocación de intercesión ecuménica: Que las Iglesias, las Religiones y las Naciones se dejen conducir por el Espíritu de Jesús de Nazaret, Espíritu de Justicia, de Amor y de Paz.
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NOTICIAS HOREB 77
Queridos hermanos y hermanas: Paz y Alegría!!!
Dos letras para desearos, los que vivimos la etapa estival y los que os coge trabajando, “tiempos de serenidad y de renovación”.
Un abrazo fraterno.
JLVB
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NOTICIAS HOREB 76
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BOLETIN HOREB 49
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BOLETIN HOREB 48
REGLA DEL HOREB
Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld
Autor: J. L. VÁZQUEZ BORAU
Estado: Público
N° de páginas: 76
Tamaño: 150×210
Interior: Color
Maquetación: Pegado
Acabado portada: Brillo
ISBN eBook en PDF: 978-1-291-95757-0
Regla de los hermanos y hermanas de la Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld.
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REGLA DEL HOREB
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